La cinta Cowboy de medianoche marcó un hito histórico al convertirse en el único largometraje con clasificación X en ganar el premio de la Academia a la mejor película. Estrenada originalmente el 25 de mayo de 1969, la obra dirigida por John Schlesinger abordó temas de soledad, supervivencia y sexualidad en Nueva York, elementos que en su momento generaron controversia y debate.
Un casting inesperado
Dustin Hoffman, reconocido por su papel en El graduado, asumió el rol de Enrico “Ratso” Rizzo, un enfermo estafador neoyorquino. “Tuve problemas con ella tal como lo veo ahora”, confesó el actor en una entrevista con BBC en 1970, refiriéndose a su interpretación. Para lograr la caracterización, el actor recurrió a métodos intensos, incluyendo el uso de una piedra en su zapato para cojear naturalmente.
Jon Voight, quien interpretó a un ingenuo joven tejano con aspiraciones de gigoló, no fue inicialmente considerado para el papel. Schlesinger expresó que su apariencia no encajaba con el prototipo buscado, pero tras insistencia de la directora de casting Marion Dougherty, el actor realizó una prueba que lo posicionó entre los candidatos. Su elección final se debió, según el director, a “una personalidad agresiva combinada con dulzura e inocencia” necesarias para el personaje.
Desafíos en la producción
El proceso creativo enfrentó obstáculos desde el inicio. El productor Joe Janni rechazó el proyecto, advirtiendo que podría afectar la carrera del director. Schlesinger, quien se identificaba con la temática de marginación social, defendió la narrativa: “No me interesan finales pseudofelices porque no creo que sean ciertos”.
La selección musical también fue compleja. Inicialmente se intentó trabajar con compositores como Bob Dylan y Joni Mitchell, pero la versión final incluyó Everybody’s Talkin’ de Harry Nilsson, cuya letra encapsulaba el anhelo y desorientación de los protagonistas. Aunque ejecutivos de United Artists intentaron reemplazarla, su impacto durante la primera proyección convenció de su permanencia.
Clasificación y reconocimiento
Por contener escenas explícitas de violación, prostitución y consumo de drogas, la película recibió inicialmente clasificación “Restringida”, permitiendo su exhibición solo con acompañamiento adulto. Sin embargo, el estudio elevó la calificación a “X”, típicamente asociada con material pornográfico. Esta decisión, que normalmente afectaría su distribución, fue utilizada como estrategia de marketing con anuncios que afirmaban: “Todo lo que oyes sobre Cowboy de medianoche es verdad”.
A pesar de las limitaciones, el film recaudó diez veces su presupuesto de 4 millones de dólares y se posicionó como la tercera película más taquillera de 1969. Su éxito le valió tres premios Óscar, incluyendo mejor dirección para Schlesinger y mejor guion adaptado. La distinción a mejor película consolidó su legado como única obra con clasificación X en recibir este reconocimiento.
“No me imaginaba que estábamos ante algo que iba a ser tan exitoso”, afirmó Schlesinger sobre el impacto del film.
Considerada parte del movimiento del Nuevo Hollywood junto con cintas como Bonnie y Clyde y Easy Rider, la obra fue seleccionada por la Biblioteca del Congreso en 1994 para su preservación por su relevancia cultural e histórica. Schlesinger, en una entrevista posterior, consideró improbable que una historia similar hubiera podido realizarse décadas después: “Si presentara hoy la historia, me mostrarían la puerta”, aseguró.