Bill Goldberg, exfigura destacada de la WWE, ha confirmado en su podcast CarCast que ya tiene establecida la fecha de su última presentación en el ring, aunque prefiere mantenerla en secreto por ahora. El luchador, de 58 años, ha reconocido los obstáculos que ha enfrentado durante su preparación física, incluyendo lesiones recientes.

Lesiones y sacrificios en su preparación

“Sé la fecha (de mi combate de retiro). Nadie más la sabe públicamente… Me he lesionado un par de veces en los últimos tres meses. Pero he tenido que frenar”, confesó el exUniversal Champion. “Me exijo un nivel altísimo que yo mismo establezco, y en el 99% de las veces no es realista. He estado en el ring un par de veces y voy a volver a entrar hoy. Es difícil, muy difícil”.

Goldberg ha incorporado entrenamiento de Muay Thai para mejorar su forma, pero el proceso no ha estado exento de contratiempos. Entre los últimos daños físicos, mencionó molestias en el hombro, el bíceps y una distensión muscular en el isquiotibial. “Vas al gimnasio de Muay Thai, golpeas los paos sin volverte loco y terminas fastidiándote el hombro, el bíceps y tirándote el isquio por intentar una patada alta”, explicó detalladamente.

Retos en su acondicionamiento físico

El esfuerzo por lograr su mejor estado físico para el retiro también ha tenido repercusiones en otros aspectos. El luchador reveló que intentó subir de peso hasta alcanzar las 270 libras, pero tuvo que retroceder. “Comía ocho veces al día y sentía que iba a vomitar en cualquier momento porque estaba completamente lleno. Casi llego a las 270 y tuve que echarme para atrás porque no podía moverme bien”, declaró.

Entre los padecimientos físicos que arrastra, resaltan problemas en la rodilla izquierda, que le impiden correr con normalidad, y un hombro derecho que no había podido utilizar desde hace cinco años. “No puedo correr. Bueno, puedo correr, pero duele… El kickboxing no duele tanto porque no implica correr”, comentó. “No había podido usar mi brazo en cinco años. He tenido que volver a entrenarlo para tareas cotidianas y reaprender a usarlo”.

Cambio de look para su despedida

Una de las sorpresas que ha compartido es su intención de modificar uno de los elementos más emblemáticos de su identidad visual: la vestimenta. “Me aterra volver a ponerme esos calzoncillos, esos trunks. Puede que hasta use otro tipo de trunks por primera vez en mi vida”, indicó.

Aunque la fecha de su último combate sigue siendo un misterio, el nivel de compromiso que está demostrando Bill Goldberg para llegar en óptimas condiciones deja en claro que su partida del ring será tan intensa y auténtica como su carrera dentro de la WWE.

Ascendencia complicada

Frida Guzmán, joven de 20 años y nieta del exjefe del Cártel de Sinaloa, busca destacar en la industria musical con su primera producción discográfica titulada ‘Andas contando‘, en colaboración con Ceci Milán. La artista asegura que no se avergüenza de su apellido, aunque reconoce que este representa un obstáculo para su carrera.

Contexto familiar

Hija de Edgar Guzmán, uno de los hijos del narcotraficante, la joven nació en Sinaloa pero se trasladó a Estados Unidos tras el fallecimiento de su padre en 2008. Su madre, Frida Muñoz, rompió relaciones con la familia Guzmán y formó un nuevo hogar con el exboxeador Julio César Chávez Jr, quien se convirtió en su figura paterna.

Proceso de identidad

En declaraciones recientes, la cantante mencionó que “no oculta su apellido, pues no tiene nada de qué avergonzarse, aunque la gente la tache de ser alguien que no es”. A pesar de las controversias que rodean a su familia política, Frida destacó que su infancia estuvo marcada por momentos memorables relacionados con la carrera de su padrastro en el boxeo.

Relaciones públicas

El divorcio entre Frida Muñoz y Julio César Chávez Jr fue anunciado públicamente en 2023 mediante una transmisión en redes sociales, aunque el proceso legal comenzó hasta diciembre. A pesar de los conflictos derivados de las adicciones del exboxeador, la pareja continúa apareciendo en público de manera conjunta.

El fundador de WWE, Vince McMahon, realizó una nueva transacción financiera al vender 1.579.000 acciones clase A de TKO por 250 millones de dólares. El movimiento se concretó mediante una operación privada con Endeavor Group Holdings el 3 de junio de 2025, según registros oficiales presentados ante la SEC el día siguiente.

Consolidación de poder en el conglomerado

Este acuerdo eleva a más de 2.000 millones de dólares los ingresos generados por McMahon desde la fundación de TKO. Endeavor, ahora operando como WME Group, incrementó su participación accionaria en la empresa hasta el 61,7%, consolidando su dominio sobre la organización que integra tanto UFC como WWE.

La estructura accionaria de McMahon reflejaba previamente 8 millones de títulos, equivalentes al 9,8% del valor económico aunque con menor influencia decisoria (4,1%) debido a las características de los votos asociados a sus acciones.

Salida estratégica del magnate

McMahon abandonó su puesto en el consejo directivo de TKO en enero de 2024, meses después de enfrentar denuncias legales por parte de Janel Grant, exempleada de WWE.

“Aunque él ha negado todos los cargos”

, la controversia derivó en su retiro definitivo de responsabilidades operativas.

Paralelamente a esta transacción financiera, el empresario estableció recientemente una nueva compañía de inversiones desde Stamford, ciudad que históricamente ha sido su base operativa. Esta iniciativa marca un nuevo capítulo en su trayectoria empresarial fuera del universo deportivo-entretenimiento.