Origen del fenómeno colectivo
Jared Leto y los miembros de su agrupación musical Thirty Seconds to Mars desarrollaron un proyecto denominado “Mars Island”, el cual ellos mismos han caracterizado como un “culto” o “secta”. Este concepto, surgido en 2019, busca integrar a adeptos que respaldan las iniciativas del grupo.
El entorno de Leto se ha visto envuelto en controversia recientemente debido a nueve denuncias de mujeres que lo acusan de abuso sexual. Aunque el artista ha negado las acusaciones, la atención mediática ha resaltado este movimiento colectivo que ha promovido desde hace varios años.
Antecedentes del fanatismo musical
Los seguidores de Thirty Seconds to Mars, conocidos como “Echelon”, han mantenido un apoyo inquebrantable hacia la banda desde su formación en 1998. Esta conexión se fortaleció en 2015 con la iniciativa “Camp Mars”, un encuentro que reunió a fanáticos dispuestos a invertir grandes sumas de dinero para participar en actividades exclusivas con la agrupación.
Durante estos eventos, los asistentes disfrutaban de presentaciones privadas y tenían acceso anticipado a nuevos lanzamientos musicales del grupo estadounidense.
Transformación del concepto en Croacia
El giro definitivo hacia “Mars Island” se dio en 2019 durante un encuentro celebrado en Croacia. En esta ocasión, Leto adoptó una vestimenta particular con túnicas blancas y su característica melena castaña, lo que generó comparaciones con representaciones artísticas de figuras espirituales históricas.
Las imágenes difundidas por las redes sociales oficiales del grupo mostraban a multitudes vestidas de blanco rodeando al artista, acompañadas del mensaje “sí, esto es una secta”. Esta presentación generó polémica y debate en diversos espacios digitales.
Reacciones de los participantes
Asistentes a estos encuentros han señalado que la experiencia dista de las críticas que circulan en internet. Sin embargo, la controversia en torno a las prácticas y dinámicas del movimiento continúa creciendo, especialmente en medio de las recientes acusaciones contra el vocalista principal.
