Trayectoria de un fenómeno desde el fracaso inicial
La serie Stranger Things acumula más de 140 millones de visualizaciones desde su lanzamiento, convirtiéndose en la segunda producción más consumida en la historia de Netflix. Sin embargo, su camino hacia el éxito estuvo lleno de obstáculos, pues 20 cadenas de televisión rechazaron el proyecto durante cinco años
La plataforma de streaming se convirtió en su salvación al apostar por el concepto original cuando nadie más creyó en él. La historia creada por los hermanos Duffer combina elementos de ciencia ficción, drama y nostalgia ochentera que hoy cautivan a millones de seguidores
De piloto rechazado a fenómeno cultural
Los creadores diseñaron el episodio piloto como tributo a Steven Spielberg y Stephen King, combinando adolescentes enfrentando entidades sobrenaturales y una protagonista con habilidades psíquicas. Esta mezcla no convenció inicialmente a las productoras tradicionales, que la consideraron excesivamente oscura o inapropiadamente infantil
‘Mi infancia estuvo repleta de películas de Disney en VHS. Bien podría ser un personaje de ‘El diario de Bridget Jones’, ‘Fleabag’ o ‘Parks and Recreation’
comentó el redactor Sergio Negrete, destacando la conexión emocional que establece la serie con el público
Resurrección de una década icónica
El impacto cultural del programa trascendió la pantalla, provocando un renacimiento de las melodías de los años ochenta en la actualidad. Su debut en 2016 marcó el inicio de una revolución en el entretenimiento digital, posicionando a Netflix como líder en contenidos originales
Netflix aprovechó su momento de expansión en producciones propias para mantener intacta la esencia del proyecto. La apuesta por Stranger Things consolidó su estrategia de convertir conceptos innovadores en éxitos masivos, junto a títulos como Bridgerton, Monstruo: La historia de Jeffrey Dahmer y Merlina