El legado de un narrador estadounidense
Richard Ford, nacido en Mississippi en 1944, es reconocido como una figura esencial de la literatura norteamericana del siglo XX. Ganador del Premio Pulitzer y del PEN/Faulkner por ‘El día de la Independencia’, además del Premio Princesa de Asturias en 2016, su obra refleja una búsqueda de esperanza en medio del declive de Estados Unidos.
Frank Bascombe y la despedida literaria
El escritor conversó con BBC Mundo durante el festival Centroamérica Cuenta, donde presentó ‘Sé mía’, su última novela que marca la despedida de Frank Bascombe, su personaje más emblemático. ‘Sé mía’ explora la búsqueda de la felicidad a pesar de las pérdidas personales, como la muerte de un hijo.
“Incluso cuando hayas perdido un hijo o a tu esposa, nada te exime de tu responsabilidad de ser feliz”
La política en la vida cotidiana
Para Ford, aunque sus novelas no aborden temas políticos de forma explícita, la vida íntima de sus personajes refleja lo que ocurre en la esfera pública. Actualmente trabaja en un ensayo sobre la escritura política, donde argumenta que la política está presente en cada acción individual.
“Creo que soy un escritor político, aunque no escriba sobre política directamente. Todo lo que ocurre en la vida íntima, incluso a pequeña escala, refleja algo que sucede en la esfera pública”
Críticas y visiones contemporáneas
El autor ha expresado preocupación por la polarización y la supresión del pensamiento crítico en su país. También ha cuestionado la evolución de movimientos progresistas que, en su opinión, han sido manipulados por posturas extremas.
“A veces puedo estar a favor, a veces en contra. Yo estoy a favor de este país, a pesar de que tiene todo tipo de imperfecciones”
Proyectos futuros
Después de publicar ‘Sé mía’, Ford tomó un descanso prolongado, más largo que los habituales. Su próximo proyecto podría ser una novela cómica, pues considera que la sociedad necesita aprender a reír nuevamente.